Hoy en día existe un consenso amplio a la hora de afirmar que la finalidad de la educación no consiste sólo en dar contenidos a los alumnos. Hay que dotarlos de recursos para que se conviertan en ciudadanos competentes. Los alumnos deben entender el mundo que les rodea y participar activamente. Diferentes autores hablan de la
alfabetización múltiple (básica, audiovisual, tecnológica, digital e informacional) que nos proporciona el acceso al conocimiento.
No tiene más conocimiento la persona con más información sino aquella que sabe manejar mejor.
Por lo tanto, la
sociedad de la información exige nuevos conocimientos, nuevas habilidades y, especialmente, nuevas actitudes que pueden agruparse bajo la denominación
"competencia digital". Las
habilidades digitales son habilidades esenciales para la vida y, en especial, para los jóvenes como herramientas para la participación ciudadana.
No podemos obviar el papel fundamental de los docentes como mediadores en todo este
proceso de digitalización de los contenidos digitales. El
informe Horizon 2014, publicado por New Media Consortium, destaca las tendencias tecnológicas que afectarán la educación en los próximos años. Uno de los capítulos de este informe se centra en aquellos aspectos que f
renan la adopción de las nuevas tecnologías en el ámbito educativo.
La no inclusión de elementos de digitalización por parte de los docentes, se presenta como uno de los elementos más urgentes a superar. Por lo tanto, ya no es sólo una cuestión tecnológica sino que también hay una vertiente de actitudes y de habilidades a tener en cuenta.
Partiendo de esta reflexión, es necesario plantear proyectos de educación digitales sencillos en el uso y aplicación de las nuevas tecnologías en la enseñanza al alcance de cualquier docente. En estos proyectos será necesario integrar
herramientas y recursos Web 2.0 gratuitos.
Los
recursos Web 2.0 son tecnologías abiertas, flexibles y fáciles de utilizar con un gran potencial como apoyo organizativo para el estudio. Su valor radica en que el usuario puede relacionarse y cooperar con el objetivo de publicar, compartir y transformar el conocimiento. Además, son unas herramientas perfectas que se adaptan al ritmo de aprendizaje de cada alumno en función de sus capacidades y aptitudes.
En cuanto a las
actividades en soporte digital, hasta ahora se han desarrollado paquetes de ejercicios de diversa tipología: preguntas verdadero-falso, respuesta múltiple, rellenar los huecos, asociar conceptos, ordenar los pasos de un proceso, sopas de letras , entre otros. A nuestro juicio, estas actividades no permiten un desarrollo íntegro de las competencias digitales de los alumnos.
Unas
actividades digitales pensadas para el
desarrollo de las competencias digitales deberían tener en cuenta 5 aspectos:
- Competencia informacional. Capacidad de buscar, analizar, evaluar e interpretar la información.
- Competencia tecnológica. Uso de las herramientas tecnológicas y valorar qué soluciones se adaptan mejor a nuestras necesidades.
- Competencia cognitiva. Capacidad para discriminar, ser críticos y selectivos ante las diferentes fuentes informativas.
- Ciudadanía digital. Adquisición de pautas de conducta para convivir en un entorno digital.
- Alfabetizaciones múltiples. Aprender a interpretar ya expresarse en los diferentes lenguajes digitales.
De este modo, los
recursos Web 2.0 nos ofrecen una gran oportunidad para la aplicación de
estrategias didácticas innovadoras con las que podemos captar la atención de los estudiantes, convirtiéndose en los protagonistas de su proceso de aprendizaje.
La utilización de estos recursos debe permitir que los estudiantes puedan:
- Trabajar con eficacia los contenidos curriculares.
- Crear conocimientos y publicarlos a través de uso de herramientas de edición digital.
- Utilizar las TIC como instrumento creativo y de innovación.
- Realizar proyectos, solucionar problemas y tomar decisiones en entornos digitales.